Los teléfonos inteligentes se han convertido en una plataforma de juegos, pero no todas las compañías apuestan por ellos. El lanzamiento de una aplicación de Pokémon para los móviles de Apple y Android este mes había calentado los rumores sobre un cambio de estrategia de Nintendo. Pero la compañía, a través de Bloomberg, ha desmentido que nada vaya a cambiar en sus planes empresariales. El caso Pokémon se explica porque Nintendo solo tiene el 32% de la propiedad de la sociedad que lo explota comercialmente y, por tanto, no es dueña totalmente de las decisiones que tome. Pero el resto de juegos que sean propiedad de Nintendo permanecerán sin salir de sus consolas.
Nintendo, que recientemente ha lanzado su portátil 3D, reservará su catálogo para sus consolas, afirma un portavoz de la compañía. Para Nintendo, Mario, Zelda o Donjkey Kong son joyas propias que no piensa compartir con otras plataformas.
Una estadística reciente de Nielsen, tras estudiar el uso de aplicaciones durante 30 días, estableció que las aplicaciones de juegos lideraban el empleo de los teléfonos móviles con un 64%. Le seguían las aplicaciones dedicadas a metereología, redes sociales, mapas de navegación, música y noticias. Tanto los móviles como las redes sociales han abierto un mercado de juegos, con una gráfica sencilla pero con una propuesta atractiva. El negocio en muchos casos no se halla en la venta del juego (el modelo de Nintendo) si no en la compra de suplementos que mejoren la experiencia en el juego o den más poderes a los personajes controlados por el jugador.
Nintendo, que recientemente ha lanzado su portátil 3D, reservará su catálogo para sus consolas, afirma un portavoz de la compañía. Para Nintendo, Mario, Zelda o Donjkey Kong son joyas propias que no piensa compartir con otras plataformas.
Una estadística reciente de Nielsen, tras estudiar el uso de aplicaciones durante 30 días, estableció que las aplicaciones de juegos lideraban el empleo de los teléfonos móviles con un 64%. Le seguían las aplicaciones dedicadas a metereología, redes sociales, mapas de navegación, música y noticias. Tanto los móviles como las redes sociales han abierto un mercado de juegos, con una gráfica sencilla pero con una propuesta atractiva. El negocio en muchos casos no se halla en la venta del juego (el modelo de Nintendo) si no en la compra de suplementos que mejoren la experiencia en el juego o den más poderes a los personajes controlados por el jugador.
Vía | elpais.com