Podríamos estar todo el día discutiendo sobre si el Samsung Galaxy Note es demasiado grande o no. Al final lo único cierto es que el híbrido de Smartphone y tablet de la coreana ha abierto un nuevo nicho de mercado y se ha hecho con el favor de un buen segmento de consumidores.
Buena prueba de este éxito es el lanzamiento del Samsung Galaxy Note II. La nueva versión de este gigante apenas cambia la configuración original y se limita a incorporar un nuevo diseño más atractivo y a mejorar algunos detalles. Esa aproximación tan conservadora sugiere que la coreana no quiere cambiar demasiado lo que ya funciona.
Por fuera, el Samsung Galaxy Note II es un claro descendiente estético del Samsung Galaxy S III. La carcasa en metal y plástico blanco de líneas curvas es unos milímetros más delgada y estrecha, aunque un poco más alta que el original (151.1 × 80.5 × 9.4 milímetros frente a 146.9 × 83 9.7 milímetros del modelo anterior).
La pantalla ha crecido de 5.3 a 5.5 pulgadas y es un poco más estrecha (720 × 1280 frente a 800 × 1280 del Note) lo que reduce un poco la densidad de pixel. Sobre el terreno no se aprecian diferencias.
Internamente, las principales novedades del Note II es que eleva el procesador Quad Core Exynos ARM Cortex A9 de 1.4 a 1.6GHz, sube el Bluetooth a 4.0 y añade NFC. La memoria pasa de 1 a 2GB y, además de los modelos con 16 y 32GB de memoria interna, surge un tercero con 64GB.
Otra mejora importante es la batería, que ahora pasa a ser una 3.100mAh frente a los 2.500mAh del Note original.
Aparte de estos cambios de hardware, Samsung se ha concentrado en mejorar la experiencia de uso con el stylus S-Pen. En este sentido, el Samsung Galaxy Note II supera ahora el centenar de niveles de presión.
También incorpora un sistema que muestra un pequeño cursor en pantalla cuando movemos el stylus sobre ella sin tocarla, lo que ayuda mucho a orientarse, sobre todo al dibujar.
El Note II es capaz de algunos trucos nuevos como previsualizar correos electrónicos, citas del calendario, fotos y vídeos con sólo pasar este cursor por encima. Basta extraer el S-Pen en modo reposo para que el dispositivo se active y muestre un menú con las principales aplicaciones táctiles. Si extraemos el stylus durante una llamada se abre automáticamente una nota para que apuntemos lo que sea.
¿Merece la pena comprarse un Samsung Galaxy Note II si ya tenemos el I? Nuestra opinión es que no, ya que ambos son muy similares en prestaciones. Por otro lado, si lo que queremos es un cruce híbrido entre Smartphone y tablet con funcionalidades avanzadas de stylus, el Samsung Galaxy Note II es lo mejor que hemos visto hasta ahora. El rediseño, además, mejora mucho su imagen.
Buena prueba de este éxito es el lanzamiento del Samsung Galaxy Note II. La nueva versión de este gigante apenas cambia la configuración original y se limita a incorporar un nuevo diseño más atractivo y a mejorar algunos detalles. Esa aproximación tan conservadora sugiere que la coreana no quiere cambiar demasiado lo que ya funciona.
Cambios del Galaxy Note II
Por fuera, el Samsung Galaxy Note II es un claro descendiente estético del Samsung Galaxy S III. La carcasa en metal y plástico blanco de líneas curvas es unos milímetros más delgada y estrecha, aunque un poco más alta que el original (151.1 × 80.5 × 9.4 milímetros frente a 146.9 × 83 9.7 milímetros del modelo anterior).
La pantalla ha crecido de 5.3 a 5.5 pulgadas y es un poco más estrecha (720 × 1280 frente a 800 × 1280 del Note) lo que reduce un poco la densidad de pixel. Sobre el terreno no se aprecian diferencias.
Internamente, las principales novedades del Note II es que eleva el procesador Quad Core Exynos ARM Cortex A9 de 1.4 a 1.6GHz, sube el Bluetooth a 4.0 y añade NFC. La memoria pasa de 1 a 2GB y, además de los modelos con 16 y 32GB de memoria interna, surge un tercero con 64GB.
Otra mejora importante es la batería, que ahora pasa a ser una 3.100mAh frente a los 2.500mAh del Note original.
Mejorar la experiencia táctil
Aparte de estos cambios de hardware, Samsung se ha concentrado en mejorar la experiencia de uso con el stylus S-Pen. En este sentido, el Samsung Galaxy Note II supera ahora el centenar de niveles de presión.
También incorpora un sistema que muestra un pequeño cursor en pantalla cuando movemos el stylus sobre ella sin tocarla, lo que ayuda mucho a orientarse, sobre todo al dibujar.
El Note II es capaz de algunos trucos nuevos como previsualizar correos electrónicos, citas del calendario, fotos y vídeos con sólo pasar este cursor por encima. Basta extraer el S-Pen en modo reposo para que el dispositivo se active y muestre un menú con las principales aplicaciones táctiles. Si extraemos el stylus durante una llamada se abre automáticamente una nota para que apuntemos lo que sea.
¿Merece la pena comprarse un Samsung Galaxy Note II si ya tenemos el I? Nuestra opinión es que no, ya que ambos son muy similares en prestaciones. Por otro lado, si lo que queremos es un cruce híbrido entre Smartphone y tablet con funcionalidades avanzadas de stylus, el Samsung Galaxy Note II es lo mejor que hemos visto hasta ahora. El rediseño, además, mejora mucho su imagen.
Vía | Xataka